Inferencias del Antiguo Testamento

Voy a tratar de hacer una inferencia parafraseada del primer capitulo del libro El plan de Dios en Antiguo Testamento del autor Jack b. Scott con el objetivo de establecer un conocimiento que nos sirva para pasar a un nivel mas gráfico del entendimiento de las escrituras y así poder aplicar observaciones de estudios mas simples pero profundas de las mismas. Me he comenzado a apasionar por el Antiguo Testamento desde que comencé a estudiar en el Seminario Teológico Birmingham y sus lecciones del Ministerios Tercer Milenio (IIIM).

Le doy gracias a Dios por la maravillosa oportunidad que nos brinda de conocer su palabra por medio de organizaciones como estas que de una manera gratuita ponen a disposición de su pueblo todos los recursos en el Internet para que podamos tener acceso a ellos.

Y aquí vamos estos fueron los puntos de inferencia por cada párrafo del primer capitulo:Voy a tratar de hacer una inferencia parafraseada del primer capitulo del libro El plan de Dios en Antiguo Testamento del autor Jack b. Scott con el objetivo de establecer un conocimiento que nos sirva para pasar a un nivel mas gráfico del entendimiento de las escrituras y así poder aplicar observaciones de estudios mas simples pero profundas de las mismas. Me he comenzado a apasionar por el Antiguo Testamento desde que comencé a estudiar en el Seminario Teológico Birmingham y sus lecciones del Ministerios Tercer Milenio (IIIM).

Le doy gracias a Dios por la maravillosa oportunidad que nos brinda de conocer su palabra por medio de organizaciones como estas que de una manera gratuita ponen a disposición de su pueblo todos los recursos en el Internet para que podamos tener acceso a ellos.

Y aquí vamos estos fueron los puntos de inferencia por cada párrafo del primer capitulo:

En el Antiguo testamento es emocionante ver a Dios tratar con un pueblo, de forma progresiva nombrando Israel para hacerlo suyo y apartarlo de las demás naciones . La historia de ese trato le concierne a los hijos de Dios de hoy día porque también pueblo Suyo somos. Lo que Le dijo hace miles de años a los Israelitas sigue siendo importante para su iglesia.

Dios no cambia. Las necesidades de su pueblo tampoco. La naturaleza del ser humano tampoco ha cambiado, solo Dios puede cambiar al hombre. El Antiguo Testamento es la historia de como Dios convirtió el corazón de un pueblo pecador en una nación santa.

Dios escogió su pueblo. hizo ese pueblo suyo. Esto comenzó en el Edén. Los testigos del pasado tienen mucho que decirnos hoy.

El Genesis nos habla del origen de ese pueblo. El Genesis nos habla del propósito de Dios con su creación, de un Dios de orden que crea todas las cosas buenas para que le glorifiquen. El Genesis habla de la entrada de la maldad en el hombre, de la perdida de la relación armónica entre Dios y su criatura, de el sufrimiento la perversión y el juicio del diluvio.

La necesidad de gracia y salvación que el hombre tiene de Dios se dejan ver como las Doctrinas protagónicas del Genesis. Así quedan clara las marcas distintivas de los hijos de Dios, la imperante necesidad de El y confianza en El Por encima de todo.

El Genesis nos muestra que la elección y el llamado de Dios es individual, uno a uno son llamados a la fe en El y por El. En estos la fe crece gradualmente por la acción de la gracia. En ningún libro de la Biblia se ve crecer una fe como la de Abraham. También nos encontramos con el amor que crece en el corazón de hombres pecadores por la obra de la gracia de Dios en ellos.

Otra marca que Dios puso en sus hijos es la esperanza, que se muestran con las promesas, las dos principales la esperanza en una simiente y una herencia permanente. Esta simiente de la mujer culminara en Cristo.